Un lifting facial, también conocido como ritidectomía, es un procedimiento quirúrgico estético que busca rejuvenecer el rostro y cuello, eliminando el exceso de piel y tensando los músculos faciales para reducir la flacidez y las arrugas. El objetivo es lograr un aspecto más firme, juvenil y natural, mejorando la apariencia general del rostro.
¿En qué consiste el procedimiento?
Incisiones:Se realizan incisiones estratégicas alrededor de la cara, típicamente en la línea del cabello, sienes y detrás de las orejas, para acceder a los tejidos subyacentes.
Tensado de músculos:Los músculos faciales se tensan y reposicionan para crear una base más firme para la piel.
Eliminación de exceso de piel:Se elimina el exceso de piel y, si es necesario, grasa.
Cierre de incisiones:Las incisiones se cierran con suturas para minimizar las cicatrices.